Mateo 14:13-21
Lo que conocemos como la "Alimentación de los cinco mil", fue un hecho que en realidad incluía a muchas más personas. Si no contaron a los mujeres y a los niños es lógico suponer que se trataba de una multitud de unos diez a quince mil personas. Al sanar y enseñar se destaca que Jesús tuvo compasión de ellos. Luego en vez de dejarlos ir para comprar su comida, les pide a sus discípulos que les den de comer. Ellos contaban con cinco panes y dos pescados, lo que en términos prácticos no parecía "suficiente". Pero, Jesús tomó esta situación "insuficiente" y la transformó en "más que suficiente". Como resultado comieron todos y sobraron doce canastas llenas de pedazos que sobraron.
A veces estoy sirviendo a otros, compartiendo lo que recibí de Jesús, y me siento sin fuerzas, siento que no tengo lo "suficiente", la gente necesita más de lo que yo pueda darles. Me siento incapaz, inadecuado/a, limitado/a, "insuficiente". Pero, Dios toma eso que parece "insuficiente" y lo transforma en "más que suficiente". Algo que es como un grano de mostaza y lo transforma en un gran árbol fructífero.
Una y otra vez, en mi experiencia diaria, debo reconocer que los resultados de lo que hago no dependen totalmente de mi, de mis capacidades o aptitudes, de lo que tengo o de lo que no tengo; sino que depende mucho más de quien está conmigo, de Jesús, que transforma mi "insuficiencia" en "más que suficiente".
Una y otra vez puedo ver que a pesar de mi y mis limitaciones, Dios hace grandes cosas. Esto me ayuda a ser más humilde y me hace maravillar ante la obra de Dios, que se digna a usar un instrumento tan frágil como yo.
Oración: Gracias Señor por estar conmigo. Tu presencia hace toda la diferencia. Contigo todo se transforma. Te entrego lo que para mi es "insuficiente" para que lo hagas "más que suficiente". Me entrego en tus manos para que me transformes y me uses para ayudar a otros, como lo haces tú.
Siguiendo al maestro.
Por Daniel Martin
No hay comentarios:
Publicar un comentario